Cuando Amore y yo entramos por la puerta con gesto dubitativo, un grupo de chicas y chicos de unos veinte años, salía.
Al vernos mirar hacia todos los lados, uno de los chicos se acerca y nos dice: "Es al lado, ésto es la universidad".
Le dimos las gracias y fuimos al lado creyendo que allí estaban las dependencias para estudiantes mayores de 50 años, pero ¿con qué nos encontramos? Con un centro de mayores que nada tenía que ver con la universidad...
Me pregunto si a los veinte años yo veía a la gente de cincuenta como para creer que buscan un centro de la tercera edad ...
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Pd1: Por cierto, el cuso es de mujeres filósofas y estoy deseando empezar porque cuando tenía veinte fui a una facultad donde me hablaron de muuuuuuchos filósofos pero de ninguna filósofa y hay que conocerlas para reconocerlas.
Pd2: Hablando de edades y comienzos de nuevos caminos una vez se ha tocado el cinco, el seis, el siete y sucesivos, el otro día vi una comedia que me encantó: El club de los martes. Aunque es una comedia, es un humor con miga y mar de fondo.