domingo, 16 de marzo de 2008

TÍBET EN ARMAS



Cuando me enteré hace más o menos dos días de lo que estaba ocurriendo en Tíbet por un lado me he asombrado y por otro una vocecita me ha dicho : " Se veía venir". Y creo que las dos posturas son coherentes: por un lado Tíbet es el baluarte de la no violencia, por otro, creo que es esperar demasiado que un pueblo oprimido, privado de su identidad y su lengua, torturado y humillado antes o después no se levante en armas. Soy consciente de que no todos los tibetanos son lamas y toda paciencia tiene un límite.

Lo que más me duele de todo ésto es que China diga que estas revueltas están alentadas por el Dalai Lama. Quien piense eso es que no sabe en absoluto nada de la filosofía de este hombre.

No quiero caer en el error de juzgar a nadie, sólo quiero mandar mi energía más positiva a este pueblo desheredado y maltratado.

Om mani padme hum...