Hay cosas de la Semana Santa que no entiendo, como pueden ser la ostentación de las hermandades, los pasos llenos de oros y lujos, la poca espiritualidad que se respira en la mayoría de las ocasiones entre los nazarenos ( muchas veces he pensado que se hacen nazarenos para tocar el tambor, la trompeta o darse un paseo por la calle vestidos de forma diferente) tampoco entiendo a las llamadas "damas de mantilla" que aquí en Valencia las llamamos clavariesas, ni la presencia tan participante del ejército en algunas procesiones.
Si nos vamos a otros lugares, tampoco entiendo a "los empalaos" que todos los años nos sacan por la tele ni esos castigos físicos que la gente se hace en estas fechas.
Pero aún y así, y aunque parezca mentira, me gusta la semana santa (¿ qué le voy a hacer?. Me gusta oír a los nazarenos tocas las trompetas y los tambores y los pasos de algunas vírgenes ( si son austeras me encantan) por eso me gustan mucho los pasos de vírgenes castellanas. Y desde hace dos años me enteré de la presencia de una hermandad en Alicante que huye de todo ese rimbomborio y ostentación y sus miembros y miembras van vestidos con tela de saco de arpillera, sólo llevan contados tambores y cuando desfilan van rezando el rosario. Se llama Hermandad Penitencial del Perdón y María Medianera. La llevan poniendo dos años seguidos en la tele cuado procesiona, que es el Jueves Santo. Me gusta, al menos lo que veo. Ya sé que detrás está la Iglesia, esa institución añeja, intolerante y anquilosada, pero me gusta ese despunte de sencillez y espiritualidad.
Una vez, hace años tuve una idea : ¿ por qué no crear aquí en Torrent (o en el pueblo que nos dejen) una hermandad que se llame algo así como : Hijas de María Magdalena. Ser todas chicas y en lugar de llevar la cara tapada y esas cosas que parecen del Ku Klux Klan ir con túnicas blancas impecables y coronas de flores en la cabeza para celebrar la llegada de la primavera. Llevaríamos sólo un paso : el de María Magdalena que sería muuuuuuuy sencillo. Y tocaríamos unas trompetas alegres porque a Jesús lo matan, sí, pero resucita, y eso lo sabemos todas.
Siendo realistas no creo que nadie nos dejara ¿verdad? pero estaría chulo.
También me gusta de la Semana Santa el arnadí y después , en pascua, la mona, el panquemao y las flores de pascua. Ay... si es que al final siempre acabamos en el estómago.