En el tren, de Villacañas a Valencia.
A veces, por un instante,
la vida es tan perfecta
como un círculo de mujeres
con raíces de tierra
y pechos de mariposa.
A veces, por un instante,
la vida es tan redonda
como un mar de amapolas
entre bancales de trigo y viñas.
(Cris Carrasco García)
Imagen: Barbara Zambon